Es la primera etapa en el escultismo. El grupo de castores se llama Colonia, la nuestra es la Colonia Yumanaka.

Nuestro lema es compartir. Cada castor tiene que superarse y reconocer a las otras personas como parte de ellos, respondiendo a las necesidades de los compañeros sin importarles dar algo de sí mismos. 

Aprenden a vivir en la naturaleza mediante juegos y actividades diversas, explorando su entorno y sacando partido de todo lo que encuentren, dejando libre la creatividad e imaginación. A través de juegos y canciones van desarrollando rutinas y haciéndose responsables de sus acciones.

Un castor pasa por tres etapas:

1. Castor sin palas: cuando acaban de entrar a la colonia, en esta etapa el niño debe participar en las actividades, conocer al resto de castores e integrarse en la dinámica de la colonia.

2. Castor con palas: Es un castor que empieza a valerse por sí mismo, tiene que ir haciéndose un castor fuerte para poder compartir su trabajo con el resto de la Colonia y sea cada vez más útil en la misma.

3. Castor Keeo: Es la etapa de servicio, el castor es más responsable y deberá dar ejemplo. Se entrega una cinta y una insignia de reconocimiento a quién consiga superarla.